Trujillo en Línea (Por: Maritza Saenz Crisostomo) Estas elecciones generales trajeron de todo: candidatos presidenciales enterrados políticamente, partidos desaparecidos, acusaciones al máximo ente electoral y aspirantes al Congreso de la República que, a duras penas, superaron el centenar de votos; y otros que no llegaron ni a los 50, pese a tener un número cabalístico.
Como dice la canción de Lizandro Meza “siete son los pecados cometidos, siete son los días de la semana”, pero también siete es el número que representó a varios postulantes al parlamento, que alcanzaron la menor puntuación en la región La Libertad.
Comencemos con la agrupación Perú Posible, donde su candidato presidencial no le quedó de otra que ahogar sus penas en… ¿Dios sabe dónde? por no superar la valla electoral del 5 % de votos. Su candidata con el número 7 le seguirá los pasos con sus duros 44 puntos; Sin embargo, Sussan Novoa Pesantes tendrá la excusa de haber sido declarada improcedente para disimular un poco su derrota.
Otra con el mismo número (44) pertenece al partido Orden, Maria del Carmen Sanchez Meza, santiaguina de 25 años que estudió administración. Al parecer, solo su promoción de la UPAO votó por ella.
En el partido Frente Esperanza, Mónica Janeth Palma Castañeda, vaya que barrió bien con los votos a su favor, ya que solo se quedó con 46. Es azafata de Inversiones Gran Chimu y parece que ni sus compañeros votaron por ella.
La convocatoria a elecciones se ha convertido en la temporada favorita para que los dirigentes de las agrupaciones políticas aprovechen para postular y ver qué migajas monetarias consiguen de sus atribulados militantes. Sin ideología, sin consolidación buscaron, por dónde sea, a jovencitos o profesionales inexpertos para llenar sus listas congresales.
El conteo de la ONPE en La Libertad está al 85.59 % y los candidatos mencionados ya olvidaron (o quizás nunca soñaron) alcanzar una curul.
Hasta el momento lo único que ganaron en este proceso electoral es experiencia para no volver a postular.
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