Trujillo en Línea.- Dormido en su nueva cuna, esperaba Jesús Benjamin nuevos brazos para no sentirse tan abandonado como lo dejaron sus verdaderos padres el pasado martes. Él es un bebé de apenas diez días de nacido cuya historia conmovió hasta las lágrimas a la esposa del gobernador regional, Ana Paula Ganoza.
Ella llegó junto a su esposo para dejarle algunas donaciones como ropa, cuna, pañales y fórmulas lácteas. "Yo tengo un hijo de año y ocho meses y no tengo corazón para hacer esto", dijo antes de compremeterse, junto al gobernador, a mantenerse al cuidado del pequeño y no sólo apoyarlo en su manutención, también en sus estudios.
Según explicó el director del hospital Regional, Fernando Gil, el menor ya está de alta y sólo se espera la disposición de la fiscal para llevarlo a un albergue. Aunque llegó con el nombre de angelito, de aquí en adelante lo llamarán Jesús Benjamín, por llegar en Semana Santa.
Por su parte, Luis Valdez Farías espera una sanción idónea para los padres del bebé, si es que vuelven a aparecer. “Yo no creo que deban entregarles, han demostrado incapacidad para su cuidado y espero que sean castigados”, refirió la autoridad. (Redacción Central)
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