Trujillo en Línea.- Dos hombres fueron condenados a 35 y 30 años de pena privativa de la libertad, por el delito de violación sexual a menor de edad, por los jueces que integran el Primer Colegiado Penal Supraprovincial Permanente de Trujillo, doctores Cesar Ortiz Mostacero, Egny León Jacinto y Carlos Gutiérrez Gutiérrez.
A Huilder Liza Zarpan, de 60 años de edad, el Colegiado le impuso una condena de 35 años de cárcel por abusar sexualmente de su hija E.L.S., desde que aquella tenía 10 años de edad y hasta luego de que cumpliera 14, cuando vivían en casas alquiladas ubicadas en la cuadra dos del jirón Ancash de la urbanización Aranjuez del distrito Trujillo, en la cuadra tres de la calle Elías Aguirre del sector Buenos Aires del distrito de Víctor Larco, y en la cuadra uno de la calle Putumayo.
La primera vez que la menor fue violentada sexualmente por su progenitor fue en la casa del jirón Ancash, en su habitación, donde le pidió que se desvistiera y echara sobre la cama. El hombre, correa en mano, la obligó a quitarse la ropa y tras dar rienda suelta a sus bajos instintos le dijo que no contará lo sucedido a su mamá porque ésta sufría del corazón. Aquel día Huilder Liza había estado bebiendo licor con algunos familiares y repitió el abuso sexual en diferentes oportunidades.
El 12 de enero de 2011 fue la última vez que la menor fue víctima de abuso sexual por parte del ahora condenado, siendo esta experiencia lo que la motivó que escapase de su casa por cinco meses, y contará los hechos a su tía Tomasa Sánchez Mercedes, quien luego denunció a Huilder Liza ante la Policía. Cabe precisar que el hombre está No Habido y que en la sentencia en su contra se ordena su ubicación, captura e ingreso al establecimiento penitenciario de Trujillo.
A Antero Berru Córdova, de 43 años de edad, el Colegiado le impuso una condena de 30 años de cárcel, por abusar sexualmente de su sobrina M.J.A.C., el 17 de febrero de 2013, cuando tenía 13 años de edad. Ello ocurrió en la casa del abuelo de la menor ubicada en la cuadra seis de la calle Libertad, en el distrito de Salaverry de la provincia de Trujillo, cuando su mamá y demás familiares celebraban el aniversario de su restaurante. Durante el juicio se dio a conocer que Antero Berru repitió el abuso sexual en dos oportunidades más, en junio y octubre de 2013.
La menor guardó silencio por las amenazas de muerte de su tío, en perjuicio de su mamá, hasta que no soportó más y recurrió a su profesora del colegio para contar los hechos. Antero Berru está No Habido y en la sentencia en su contra también se ordena su ubicación, captura e ingreso al establecimiento penitenciario de Trujillo. Las dos sentencias condenatorias fueron apeladas, y que serán los magistrados de una sala superior penal, quienes resuelvan los casos en segunda instancia. (NP)
Comentarios