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Trujillo en Línea.- Todo un escándalo se desató en la Subgerencia de Salud de la Municipalidad Provincial de Trujillo al salir a la luz que un lote de 200 000 medicamentos vencieron sin poder ser distribuidos. Parte del total se encontraban en el almacén desde el año 2013.
En una tibia defensa, la titular del área Liriola Alayo culpó a la gestión anterior por realizar hasta dos campañas diarias de salud que en su gestión fueron dejadas de lado. Esto provocó la adquisición de insumos que no pudieron ser repartidos el año pasado. El lote de medicamentos servía para enfermedades como hipertensión y para realizar pruebas de sangre.
Parte de los medicamentos perdieron vigencia desde hace dos años; sin embargo, hasta la fecha no fueron desechados. Como excusa, la funcionaria indicó que la gestión anterior no realizó un correcto proceso de transferencia. Trató de poner paños fríos al tema asegurando que ningún trujillano recibió medicina en mal estado. "La gestión anterior no nos dio la lista de lo que existe en la farmacia, recién lo hicimos el primer semestre del año pasado. Se puede guardar siempre que no se distribuya", manifestó.
Ha pasado un año y medio, desde que los funcionarios elegidos por Elidio Espinoza, asumieron los cargos y sorprendentemente la farmacia de la Subgerencia de Salud tampoco tiene licencia de funcionamiento.
Liriola Alayo aseguró que jamás la tuvo. "Nunca se tuvo licencia. Es una herencia de la gestión anterior. No es fácil tenerla, tenemos que presentar varios papeles y subsanar observaciones de Defensa Civil lo cual retrasa la obtención del documento".
Las observaciones fueron halladas en la segunda inspección realizada por la Gerencia Regional de Salud. Les dieron una semana para solucionar todos los problemas. (Redacción Central)
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